Mantenimiento preventivo de instalaciones eléctricas
Las instalaciones eléctricas son un elemento indispensable en prácticamente cualquier tarea de nuestro día a día. Viviendas, negocios, restaurantes, tiendas y otros espacios públicos necesitan la electricidad para continuar con su funcionamiento habitual y poder desarrollar su actividad comercial.
Por tanto, lo más adecuado es disponer de un completo plan de mantenimiento preventivo de instalaciones eléctricas. De este modo, se evita cualquier tipo de imprevisto que pueda surgir.
Para este tipo de servicios integrales de electricidad es muy importante recurrir siempre a una empresa especializada que cuente con personal altamente cualificado. Tras su valoración inicial e intervención concreta, se obtienen diversas ventajas.
Tipos de Mantenimiento de instalaciones eléctricas
Cuando hablamos de los tipos de mantenimiento eléctrico existentes, en realidad se está hablando de diferentes tareas de control y revisión de las instalaciones.
Aunque existen más subdivisiones dentro de estos trabajos periódicos, dos de los más recurrentes son el mantenimiento correctivo y el mantenimiento preventivo de instalaciones eléctricas.
1. Mantenimiento Correctivo
El mantenimiento correctivo se realiza únicamente cuando ya se tiene detectada una avería o anomalía en las instalaciones eléctricas, el objetivo es subsanar lo más rápido posible. Una vez aplicadas las modificaciones necesarias, el servicio se encontrará totalmente preparado para retomar sus condiciones normales de funcionamiento.
2. Mantenimiento Preventivo
Se centra en efectuar intervenciones regulares programadas, sin necesidad de avería conocida y en condiciones normales de funcionamiento. El objetivo es evitar y reducir al máximo la cantidad de fallos y errores que puedan sufrir las instalaciones eléctricas. Por ello, se trabaja específicamente en la protección de los trabajadores y de los propios sistemas.